Workers Solidarity Movement

La muerte reciente de Terence Wheelock bajo custodia policial, nos deja ver el trato diferencial que los detenidos de una clase reciben en relación a los de la otra clase.Las muertes de Terence Wheelock y de John Moloney estando detenidos, ha llamado nuevamente la atención hacia la brutalidad policial del Estado. Brian Rossiter y John Carthy son otros dos nombres en una larga lista, con cierta resonancia pública.

Históricamente, la policía irlandesa ha gozado de un alto grado de confianza pública, fuera de los barrios populares más pobres, así como fuera de los círculos izquierdistas y republicanos. Sin embargo, la constante filtración de noticias historias sobre corrupción y de amargas experiencias, ha erosionado este apoyo.

La violencia y la corrupción son parte de cualquier fuerza policial y por muchos años la policía irlandesa ha gozado de un velo protector para sus acciones por parte del Estado, que se percibía bajo la amenaza de los republicanos. Se forjó así una cultura de resultados a cualquier costo. Durante los ’70 ya hubo casos de una notable impunidad, por lo que la brutalidad policial no es nada novedoso.

Con el enriquecimiento de Irlanda, y sus mayores niveles de desigualdad, la clase dominante no ha mostrado voluntad de solucionar los problemas que son evidentes para todo el mundo. La policía es la primera línea de defensa del status quo, sus acciones durante cualquier crisis son cruciales para mantener a la chusma a raya. Pero como las viejas estructuras de control social se han roto, y en ausencia de una amenaza subversiva seria, el cuestionamiento del pueblo hacia la autoridad policial y sus acciones, ha aumentado.

El asesinato de varias personas en circunstancias cuestionables, ha sido cuestionado regularmente, y es raro el día en que no se escuche alguna queja hacia la policía. En ciertas comunidades, la policía es vista con resquemor y sólo se acude a ella en las circunstancias más desesperadas.

Por ahora, pese a todo lo que se vocifera, no ha habido una sanción real a la policía por sus actos. El retiro con plena pensión es usualmente el “castigo” para las más graves ofensas. Es de vital importancia que el pueblo apoye las campañas de las familias Wheelock, Moloney y de tantas otras, por justicia. Una oposición organizada puede salvar vidas y crear una atmósfera en donde la gente pueda comenzar a trabajar alternativas comunitarias a la línea dura de defensa estatal.

Liberación 1 - Boletín Internacional en Castellano del WSM - http://www.wsm.ie/story/1471

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